En medio de la pandemia mundial, muchas personas han enfrentado situaciones laborales difíciles, como quedar en ERTE (Expediente de Regulación Temporal de Empleo) y, en algunos casos, necesitar una baja médica. En este contenido, compartiré mi experiencia personal en esta situación, destacando los desafíos y las lecciones aprendidas. A través de mi relato, espero brindar información útil y apoyo a quienes se encuentren en una situación similar, así como generar conciencia sobre los obstáculos que pueden surgir durante estos tiempos inciertos. Acompáñame en este recorrido y descubre cómo afrontar la combinación de un ERTE con una baja médica.
ERTE y baja médica: ¿Qué ocurre?
Cuando un trabajador se encuentra en situación de baja médica y la empresa decide aplicar un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE), se plantean diversas situaciones y dudas sobre cómo afecta esta situación a los derechos y prestaciones del trabajador.
1. ERTE y baja médica simultáneos: Si el trabajador se encuentra en situación de baja médica y la empresa decide aplicar un ERTE, la prestación por incapacidad temporal (baja médica) se mantiene sin cambios. El trabajador continuará recibiendo la prestación económica correspondiente a su baja, ya sea por enfermedad común, accidente laboral o enfermedad profesional.
2. Compatibilidad de prestaciones: Durante el periodo de baja médica, el trabajador seguirá percibiendo la prestación económica por incapacidad temporal, mientras que, si se encuentra incluido en un ERTE, podrá recibir también la correspondiente prestación por desempleo. Estas dos prestaciones son compatibles y se pueden percibir simultáneamente.
3. Protección del empleo: El trabajador en situación de baja médica se encuentra protegido por el Estatuto de los Trabajadores y no puede ser despedido mientras dure su incapacidad temporal. Sin embargo, en el caso de un ERTE, la empresa puede suspender temporalmente el contrato de trabajo, lo que implica una reducción o cese de la actividad laboral. Es importante tener en cuenta que, aunque el contrato esté suspendido, el trabajador seguirá en situación de baja médica y mantendrá su derecho a la prestación económica.
4. Comunicación a la Seguridad Social: Tanto en el caso de la baja médica como en el del ERTE, es necesario comunicar a la Seguridad Social la situación del trabajador. En el caso de la baja médica, se debe presentar el parte médico correspondiente, mientras que en el caso del ERTE, la empresa deberá informar a la Seguridad Social sobre la suspensión temporal del contrato de trabajo.
Impacto del ERTE en la vida laboral
Un ERTE (Expediente de Regulación Temporal de Empleo) es una medida que se toma en una empresa para suspender o reducir temporalmente los contratos de trabajo de sus empleados, debido a situaciones de fuerza mayor o causas económicas, técnicas, organizativas o productivas.
El impacto del ERTE en la vida laboral de los empleados puede ser significativo. A continuación, se presentan algunos de los principales efectos que puede tener esta medida:
1. Suspensión del contrato de trabajo: Durante el periodo de vigencia del ERTE, los empleados ven suspendido su contrato de trabajo, lo que implica la interrupción temporal de sus obligaciones y derechos laborales. Esto puede tener consecuencias en aspectos como el salario, la cotización a la Seguridad Social, la acumulación de antigüedad, entre otros.
2. Reducción de jornada y salario: En algunos casos, en lugar de suspender el contrato de trabajo, se puede optar por reducir la jornada laboral y, por consiguiente, el salario de los empleados. Esta reducción puede ser de un porcentaje determinado o puede ser variable en función de las necesidades de la empresa.
3. Prestaciones por desempleo: Durante el período de suspensión del contrato de trabajo, los empleados pueden tener derecho a recibir prestaciones por desempleo, siempre que cumplan con los requisitos establecidos por la legislación laboral. Estas prestaciones pueden ayudar a compensar la pérdida de ingresos durante esta etapa.
4. Retorno a la actividad laboral: Una vez finalizado el período de suspensión o reducción del contrato de trabajo, los empleados deben reincorporarse a sus labores habituales. Sin embargo, es posible que existan cambios en la organización o en las condiciones de trabajo que puedan afectar la forma en que se desarrolla la actividad laboral.
5. Impacto emocional y psicológico: El ERTE puede tener un impacto emocional y psicológico en los empleados, ya que implica incertidumbre sobre su futuro laboral, preocupación por la estabilidad económica y cambios en su rutina diaria. Es importante ofrecer apoyo y acompañamiento a los empleados durante esta etapa para minimizar los efectos negativos en su bienestar.
Mi recomendación final para alguien interesado en la situación de estar en ERTE y recibir la baja médica, basada en mi experiencia, es la siguiente:
En primer lugar, es importante que te informes y conozcas tus derechos y deberes tanto como empleado en ERTE como en relación a tu baja médica. Esto te permitirá tener claridad sobre qué esperar, cómo proceder y cómo proteger tus derechos durante este periodo.
Además, es fundamental que mantengas una comunicación fluida y honesta tanto con tu empleador como con el médico que te ha otorgado la baja. Explica claramente tu situación y asegúrate de proporcionar toda la documentación y pruebas necesarias para respaldar tu caso.
Adicionalmente, te sugiero que busques apoyo y asesoramiento legal si sientes que tus derechos están siendo vulnerados o si experimentas dificultades en el proceso. Un abogado especializado en derecho laboral podrá brindarte la orientación necesaria para defender tus intereses y asegurarte de que se cumplan tus derechos.
Por último, te animo a que aproveches este periodo de ERTE y baja médica para cuidar de ti mismo/a y priorizar tu salud física y mental. Utiliza este tiempo para descansar, recuperarte y buscar actividades que te ayuden a mantener una buena salud emocional.
Recuerda que esta experiencia puede ser desafiante, pero también puede brindarte la oportunidad de reflexionar sobre tu situación laboral y buscar alternativas o mejoras para tu futuro. Mantén una actitud positiva y proactiva, y confía en que podrás superar esta situación con éxito.
¡Mucho ánimo y espero que mi experiencia te haya sido útil!